Por la creciente del río Uruguay ya se registran familias evacuadas

La provincia baja monitoreo permanente La localidad de Santo Tomé es la que más damnificados tiene. Al cierre de esta edición más de medio centenar de personas se encontraba en los centros de evacuados de acuerdo a datos oficiales. En Paso de los Libres ya se superó el nivel de alerta del río.

Las lluvias que se registraron en el sur de Brasil tienen su impacto en las localidades correntinas que se encuentran al borde del río Uruguay. En algunos municipios ya hay evacuados y otros están en alerta ante la posibilidad de creciente.

En Paso de los Libres, la marca de ayer fue 7, 87 superando 37 cm el nivel de alerta. Pese a esa situación no se registraron evacuados.

En Santo Tomé, diferentes áreas municipales, en conjunto con Bomberos Voluntarios y las fuerzas de seguridad, asistieron a las familias evacuadas y autoevacuadas. El intendente Suaid supervisó de cerca el accionar de los equipos, buscando garantizar la seguridad de los afectados.Desde Defensa Civil, en base a datos de Prefectura Naval, indicaron que la altura del río Uruguay en el puerto de Santo Tomé, a las 18 fue de 11,54 metros, creciendo de 8 a 10 cm por hora. Es decir, la localidad ya se encuentra en estado de alerta (el que se alcanza a la altura de los 11,50 metros).En los puertos aguas arriba de El Soberbio y Alba Posse se encuentra estacionado; mientras que en San Javier, Puerto Concepción y Garruchos el río continúa creciendo.

La represa Foz do Chapecó evacuaba, a las 18, un caudal de 10.838mts³/s.

En cuanto a los afectados, hasta el momento son siete familias, 18 personas autoevacuadas (a casas de familiares), y una persona evacuada en el club Carlos Gallini. El Municipio se encarga de la alimentación, de la asistencia sanitaria en conjunto con el hospital y de salvaguardar las pertenencias de los damnificados.

Las lluvias que se registraron en el sur de Brasil tienen su impacto en las localidades correntinas que se encuentran al borde del río Uruguay. En algunos municipios ya hay evacuados y otros están en alerta ante la posibilidad de creciente.

En Paso de los Libres, la marca de ayer fue 7, 87 superando 37 cm el nivel de alerta. Pese a esa situación no se registraron evacuados.

En Santo Tomé, diferentes áreas municipales, en conjunto con Bomberos Voluntarios y las fuerzas de seguridad, asistieron a las familias evacuadas y autoevacuadas. El intendente Suaid supervisó de cerca el accionar de los equipos, buscando garantizar la seguridad de los afectados.Desde Defensa Civil, en base a datos de Prefectura Naval, indicaron que la altura del río Uruguay en el puerto de Santo Tomé, a las 18 fue de 11,54 metros, creciendo de 8 a 10 cm por hora. Es decir, la localidad ya se encuentra en estado de alerta (el que se alcanza a la altura de los 11,50 metros).En los puertos aguas arriba de El Soberbio y Alba Posse se encuentra estacionado; mientras que en San Javier, Puerto Concepción y Garruchos el río continúa creciendo.

La represa Foz do Chapecó evacuaba, a las 18, un caudal de 10.838mts³/s.

En cuanto a los afectados, hasta el momento son siete familias, 18 personas autoevacuadas (a casas de familiares), y una persona evacuada en el club Carlos Gallini. El Municipio se encarga de la alimentación, de la asistencia sanitaria en conjunto con el hospital y de salvaguardar las pertenencias de los damnificados.

Los vecinos que debieron dejar sus hogares lo hicieron de manera preventiva, ya que hasta el momento el agua no alcanzó directamente a sus viviendas.

Cabe recordar que todo pedido de evacuación o asistencia se centraliza en Bomberos Voluntarios, es decir, deberán llamar al número telefónico 100.

Acciones conjuntas y asistencia
Entre el viernes, y ayer, la Secretaría de Obras Publicas y de Producción e Industria Municipal asistieron a los pobladores ubicados en la zona del Itacuá, trasladando su producción ladrillera a sectores más elevados. Algunos de ellos fueron llevados a su lote ubicado en el terreno para los inundados, que fue entregado a sus beneficiarios semanas atrás.

Miles de ladrillos listos para vender fueron salvados del avance de las aguas.