Italia: chocó un barco lleno de migrantes y hay más de 40 muertos

TRAGEDIA EN EL MAR. En la precaria embarcación viajaban alrededor de 200 personas, entre ellas muchas mujeres y chicos. Meloni lanzó un mensaje al respecto.

Al menos 45 migrantes murieron y otros 80 desaparecieron este domingo a raíz del naufragio de una embarcación frente a la costa italiana, no lejos de la ciudad de Crotone, en Calabria, según los primeros reportes.

"De momento, 80 personas fueron recuperadas con vida, algunas de ellas lograron alcanzar la orilla tras el naufragio, y se encontraron 45 cadáveres", informó un comunicado de los guardacostas.

Por su parte, Roberto Occhiuto, presidente de la región calabresa, emitió un comunicado en el que habla de "decenas y decenas de muertos ahogados, incluidos niños, muchos desaparecidos". Y dice que "Calabria está en duelo por esta terrible tragedia". 

Según los rescatistas, la embarcación transportaba unas 120 personas y chocó contra unas rocas a algunos metros de la orilla. Los bomberos, en tanto, señalan que había "más de 250 personas" a bordo.

En las imágenes difundidas por la policía italiana, se ve trozos de madera diseminados sobre la playa, donde acudieron los socorristas mientras los rescatados esperaban su traslado a un centro de acogida.

De acuerdo a la información recogida por el diario La Reppublica de Italia, el barco habría salido de Smyrna, en Turquía, hace cuatro días. Algunos de los rescatados hablan de una explosión a bordo, pero la tarea es dificil ya que muchos de los migrantes no hablan ni italiano ni inglés. La mayoría provienen de Afganistán, Irán y Pakistán.

La precaria barcaza había sido divisada ayer por la noche por un avión de la agencia Frontex (responsables del control fronterizo en la UE), que dio alerta a la guardia de Crotone. Allí avanzaron con un plan para ir a rescatar al barco, pero se encontraron con condiciones climáticas adversas, que obligaron a cancelar el operativo. 

La jefa de gobierno, Giorgia Meloni, líder del partido Hermanos de Italia (FDI, extrema derecha), expresó su "profundo dolor" en un comunicado y manifestó que era "criminal mandar a la mar a una embarcación de apenas 20 metros con 200 personas a bordo y con un mal pronóstico del tiempo".

"El gobierno está comprometido a impedir las salidas y este tipo de tragedias y seguirá haciéndolo al exigir antes de todo la mayor colaboración de los Estados de salida y de origen", aseguró.

Este nuevo naufragio tiene lugar apenas unos días después de la adopción en el Parlamento italiano de unas controvertidas nuevas reglas sobre el rescate de migrantes impulsadas por el gobierno dominado por la extrema derecha.

Meloni llegó al poder en octubre con una coalición tras haber prometido que reduciría la inmigración llegada a Italia.

La nueva ley obliga a los barcos humanitarios a efectuar un solo rescate por salida al mar, lo que según los críticos aumenta el riesgo de muertes en el Mediterráneo central, considerado como la travesía más peligrosa del mundo para los migrantes.